Como consecuencia de fuertes lluvias y avenidas de río, una red de autopistas se vio severamente afectada en firmes, estructuras y drenajes, sufriéndose daños de distinta consideración distribuidos en una amplia extensión de infraestructuras.
ASEVASA identificó todos los daños clasificándolos por ubicación y tipología, acreditó su gravedad apoyándose en estudios del firme, y los valoró mediante presupuestos de reparación de contratas especializadas.
ASEVASA acreditó que la reclamación no recogía conceptos no asegurados comunes a muchos siniestros de esta tipología: costes de mejoras respecto al estado de la vía antes del siniestro, daños preexistentes, y falta de mantenimiento.
En la determinación de la pérdida de beneficios, ASEVASA identificó y valoró los extracostes incurridos para aminorar la pérdida de ingresos, así como el margen bruto de la pérdida de facturación que no se logró evitar.
Gracias a esta visión completa del siniestro, se logró un pronto acuerdo de indemnización con la aseguradora, incluso antes de completarse las reparaciones.
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